TODO ballestero o TEMPLARIO, DEBE POSEER Y APLICAR LAS SIETE VIRTUDES
Fe, Esperanza, Caridad
Justicia, Prudencia, Fortaleza y Templanza.
FE, la primera, porque sin Fe el templario no puede saber ni entender las cosas invisibles.
ESPERANZA, la segunda, porque en la Esperanza está el Poder de Dios, en la fuerza , y las armas del templario.
CARIDAD, la tercera, porque sin la Caridad, que es el Amor, el Templario será cruel y no tendrá piedad ni misericordia. Y ningún Templario sin ella podrá soportar la carga que debe llevar un corazón noble.
JUSTICIA, la cuarta, porque sin Justicia un Templario es injurioso y ofendedor, por lo que se destruye a sí mismo.
PRUDENCIA, la quinta, porque sin Prudencia el Templario caerá en los daños corporales y espirituales y no tendrá razón, ni entendimiento, ni voluntad para mantener el honor del grupo.
FORTALEZA, la sexta, porque sin la Fortaleza el Templario caerá en la Soberbia, la Ira, la Codicia, la Gula, la Envidia y la Lujuria, porque todas ellas le engendrarán flaquezas en el corazón y no le harán digno de ser amado. La fuerza corporal no es nada sin Humildad, ni Caridad y la Ira entumece el entendimiento, perturba el espíritu y echa de sí a la iluminación.
TEMPLANZA, la séptima, porque sin Templanza no tendrá medida en comer, beber, hablar, vestir y porque sin esta Virtud no se honra al grupo.
La práctica de todas ellas, conducirán a la victoria y a la gloria.